Los números de Aroldis Chapman ya representan un caso de estudio para los votantes que avalan la entrada al Salón de la Fama de Cooperstown.
Sin embargo, el “misil” cubano prefiere no pensar en eso y simplemente seguir haciendo su trabajo. Ese que ha realizado por 15 temporadas y que lo ha llevado a ayudar a conquistar dos World Series (2016 con los Chicago Cubs y el año pasado con los Texas Rangers).
“Siempre me preguntan eso, yo solamente me enfoco y pienso en poder hacer el trabajo, poder ir a lanzar para seguir acumulando números”, dijo Aroldis Chapman antes de debutar con su nuevo equipo, los Piratas de Pittsburgh.
El cubano sacó la novena entrada del primer juego de la temporada, sin opción de salvar, con solo ocho envíos. Uno de ellos coqueteó con las 100MPH.
“Lo del Salón de la Fama lo dirá el destino, las personas que votan y están encargados. Yo no puedo hacer nada, lo único que puedo hacer es jugar y tratar de hacer el trabajo. Ya veremos qué pasa en el futuro”, argumentó Aroldis Chapman, que exhibe una efectividad vitalicia de 2.52 y acumula 321 rescates en las mayores.
Aroldis Chapman y su regreso a la Liga Nacional
El zurdo cubano regresa a la Liga Nacional después de ocho años. Su último año en el viejo circuito fue en 2016, cuando ayudó a los Chicago Cubs a terminar con la sequía de Serie Mundial.
La liga no es ajena para Aroldis Chapman, mucho menos la división. Antes de su año con los Cubs, estuvo seis años con los Reds de Cincinnati, equipo con el que debutó.
“Contento, contento de estar aquí. Vuelvo este año para la Liga Nacional, tenía tiempo sin jugar aquí”, dijo el nacido en Holguín, Cuba. “Jugaba algunos juegos, pero no había estado en la liga por unos tantos años. Vamos a empezar a recordar”.
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Aroldis Chapman lo recordó muy bien. El jueves ante los Marlins de Miami se mostró como ese gigante que todos querían hace unos años. Su velocidad se mantiene y su pericia ahora lo lleva a tener planes distintos.
“Me sentí bien gracias a Dios, todo fluyó, mecánica, el brazo, la velocidad con todos los comandos fue bien”, expresó el serpentinero caribeño luego de su debut con los Piratas de Pittsburgh.