Llegó la época de arbitraje salarial en la MLB, a pocas semanas de que arranque el Spring Training del 2024 y los Red Sox de Boston deben buscar acordar un monto con cuatro jugadores para evitar ir a una corte que fije el monto que ganaran cada uno de esos peloteros en esta próxima campaña.
Como sucedió en temporadas pasadas, este año los Red Sox ni tienen ninguna gran figura en este proceso, tomando en cuenta que los cuatro jugadores son: el recién adquirido Tyler O’Neill, proveniente de Cardinals de San Luis, los lanzadores Nick Pivetta y John Schreiber y el receptor Reese McGuire.
Este será el tercer año de Tyler O’Neill en el arbitraje salarial, y tras acordar en 2023 con San Luis por un salario de $4.95 millones, se estima que Boston fije un monto relativamente mayor. Sin embargo, todo indica a que la cifra no superaría los $6 millones.
Pivetta también está en su tercer año de este proceso, aunque el lanzador obtuvo un monto un poco mayor en 2023, al acordar por $5.35 millones. La cifra del canadiense tampoco será alarmante, y es posible que próximamente los Red Sox busquen extenderle el contrato, junto a otro par de jugadores claves.
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Schreiber por su parte va a su primer año en el que querrá evitar el arbitraje salarial. De acuerdo con el portal Spotrac, el salario que proyecta Schreiber es de $1.3 millones.
McGuire va a su segundo año y el monto estimado es de $1.6 millones, por lo que Boston pagaría menos de $15 millones por cuatro jugadores que se estima serán jugadores regulares; en especial O’Neill, Pivetta y Schreiber.
El plazo para llegar a un acuerdo es al mediodía de este jueves, de acuerdo con Jeff Passan de ESPN.