Los Red Sox de Boston no se estaban caracterizando por dar batazos de cuatro esquinas esta temporada, hasta que Tyler O’Neill y Triston Casas decidieron darle un nuevo rumbo a la ofensiva. Los dos slugger de los patirrojos castigaron a Griffin Canning con tremendos batazos seguidos para poner arriba a su equipo con los Angels de Los Ángeles en el primer juego de su serie.
Luego de que el lineup fallara en el primer inning, decidieron aplicar la fuerza en la segunda entrada, cuando Tyler O’Neill abrió la cuenta con un bambinazo solitario. El toletero, quien llegó en la temporada baja vía cambio desde los Cardinals de San Luis, lleva ya tres jonrones en ocho juegos, y además suma seis juegos seguidos conectando al menos un imparable.
El batazo del outfielder salió a una velocidad de 101.6 millas por hora, mientras que recorrió una distancia de 410 pies. Pero tan solo instantes después, Triston Casas aprovechó para extender la fiesta, al sonar su primer cuadrangular de la temporada.
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El inicialista precisamente había alineado en los otros juegos como cuarto bate, pero ahora que Alex Cora lo bajo al sexto, despachó un largo batazo hacia la banda contraria. El estacazo del slugger salió a 104mph y recorrió 397 pues.
Aunque el pitcheo abridor emergió como la principal arma de Boston en este 2024, los cañoneros como Tyler O’Neill y Triston Casas no se quedan atrás.
Reese McGuire emuló a Tyler O’Neill y Triston Casas
Momentos después del back-to-back, con Ceddanne Rafaela en primera base, el receptor Reese McGuire aprovechó también para dar otro palo de cuatro bases. Ese jonrón representó su primero de la campaña y amplió la ventaja a cuatro carreras.
Es una buena señal que los receptores del equipo también respalden a sus lanzadores desde la caja de bateo.