En un movimiento inesperado pero estratégico, los New York Yankees han adquirido al jardinero Cody Bellinger de los Chicago Cubs. Esta transacción, que incluye un aporte de 5 millones de dólares por parte de los Cubs y envía al relevista Cody Poteet a Chicago, representa un nuevo capítulo en la carrera de un jugador cuya trayectoria ha estado marcada por altos y bajos desde que ganó el premio al MVP de la Liga Nacional en 2019.
El contexto del traspaso
Tras la salida de Juan Soto rumbo a los Mets, los Yankees necesitaban con urgencia un jardinero con poder ofensivo para ocupar ese espacio en la alineación. Cody Bellinger, con su talento probado y experiencia en el centro de los jardines, parece encajar perfectamente en los planes de Nueva York. Según reportes de ESPN y USA Today, Bellinger asumirá el rol de jardinero central, lo que permitirá a Aaron Judge regresar a su posición habitual en el jardín derecho.
La motivación de los Cubs para realizar el intercambio también es clara. Con la adquisición reciente de Kyle Tucker desde los Astros, el equipo de Chicago contaba con una pieza similar en el outfield, lo que hizo más viable el traspaso de Bellinger. Además, su contrato actual, que incluye opciones del jugador para 2025 y 2026 con un valor total de 52.5 millones de dólares, se había convertido en un peso considerable para la organización.
Una carrera llena de altibajos
La historia de Cody Bellinger ha sido una montaña rusa desde que debutó en las Grandes Ligas con los Dodgers en 2017. Su consagración llegó en 2019, cuando tuvo una temporada extraordinaria con 47 cuadrangulares, un OPS de .988 y un WAR de 8.6, cifras que le valieron el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional.
Sin embargo, su trayectoria dio un giro en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional de 2020. Después de conectar un cuadrangular crucial en el Juego 7, Bellinger sufrió una dislocación del hombro derecho durante una celebración con su compañero Kiké Hernández. Aunque la lesión fue corregida con cirugía, su rendimiento ofensivo nunca volvió a ser el mismo.
Los Dodgers optaron por no ofrecerle un contrato en 2022, permitiéndole llegar a la agencia libre. Fue entonces cuando los Cubs apostaron por él con un contrato de bajo riesgo y fueron recompensados en 2023, cuando Bellinger tuvo un resurgir notable, ganando el premio al Jugador Regreso del Año con una línea ofensiva de .307/.356/.525.
Lo que significa para los Yankees
Para los Yankees, la llegada de Bellinger es un movimiento calculado. Aunque su temporada 2024 no alcanzó el nivel esperado, bateando para .266 con 18 cuadrangulares, la organización de Nueva York está apostando a que pueda recuperar su forma con un cambio de escenario y bajo la presión de jugar en el Yankee Stadium. Con 29 años, Bellinger aún está en una edad en la que podría resurgir como una pieza clave en el lineup.
Además, hay un componente emocional en este traspaso. El padre de Cody, Clay Bellinger, fue parte de los Yankees entre 1999 y 2001, ganando dos campeonatos de Serie Mundial. Ahora, Cody tiene la oportunidad de seguir los pasos de su padre y crear su propia historia con los Bombarderos del Bronx.
El futuro de Bellinger en Nueva York
La clave para el éxito de Bellinger en los Yankees será su salud y su capacidad para ajustar su swing, algo que logró temporalmente en 2023. Si logra encontrar consistencia ofensiva, podría convertirse en el bateador zurdo que los Yankees necesitan para reforzar una alineación que depende en gran medida de Aaron Judge.
En resumen, los Yankees están tomando una apuesta calculada con Bellinger, confiando en que su talento natural y su experiencia lo ayuden a redescubrir su mejor versión. A medida que la temporada 2025 se aproxima, la afición de Nueva York estará pendiente de cómo este ex MVP se adapta a su nuevo hogar en el Bronx.